Universos de cine, música, literatura y más para leer con amor
Ediciones Libertador
192 páginas
2008
Debemos admitir que la mojigatería de aquellos tiempos fue la gran enemiga del Marqués de Sade y que si juzgamos su obra con ojos del siglo XXI encontramos a un autor excéntrico y algo desequilibrado, pero para nada imposible de leer, y que no ofende la honra de ninguna persona formada y sensata. Sade, además puso de manifiesto en su obra los crímenes que se cometieron en nombre de la moral, y demostró su versatilidad regalándonos una pintura de la hipocresía reinante en la época que le tocó vivir.
Ediciones Libertador
192 páginas
2008
Debemos admitir que la mojigatería de aquellos tiempos fue la gran enemiga del Marqués de Sade y que si juzgamos su obra con ojos del siglo XXI encontramos a un autor excéntrico y algo desequilibrado, pero para nada imposible de leer, y que no ofende la honra de ninguna persona formada y sensata. Sade, además puso de manifiesto en su obra los crímenes que se cometieron en nombre de la moral, y demostró su versatilidad regalándonos una pintura de la hipocresía reinante en la época que le tocó vivir.