Universos de cine, música, literatura y más para leer con amor
Edición Integra - Clásicos Universales
124 páginas
2008
**Algunas marcas con tinta**
Macbeth, como dice su consorte, quiere ser grande, tiene ambición, pero sin la perversidad que debe acompañarla: su naturaleza está demasiado nutrida por la leche de la conmiseración humana para ir por un atajo hasta su objeto. Ansía a toda costa lo grande, y lo quiere santamente, pero, aunque le repugna jugar con ventaja, quiere ganar incluso sin tener razón. ¡Qué carácter antes del crimen! ¡Qué carácter después de tomada la decisión! Mata a los dormidos chambelanes; asesina a Banquo, celoso de la felicidad que le han prometido las brujas; se deshace de los hijos de Macduff... Sin embargo su conciencia ve peligros, conspiraciones y horror por todas partes; su razón se ofusca, y, haciéndole creer en la perpetuidad de su mal adquirida posesión, lo conduce por fin a la ruina.
Edición Integra - Clásicos Universales
124 páginas
2008
**Algunas marcas con tinta**
Macbeth, como dice su consorte, quiere ser grande, tiene ambición, pero sin la perversidad que debe acompañarla: su naturaleza está demasiado nutrida por la leche de la conmiseración humana para ir por un atajo hasta su objeto. Ansía a toda costa lo grande, y lo quiere santamente, pero, aunque le repugna jugar con ventaja, quiere ganar incluso sin tener razón. ¡Qué carácter antes del crimen! ¡Qué carácter después de tomada la decisión! Mata a los dormidos chambelanes; asesina a Banquo, celoso de la felicidad que le han prometido las brujas; se deshace de los hijos de Macduff... Sin embargo su conciencia ve peligros, conspiraciones y horror por todas partes; su razón se ofusca, y, haciéndole creer en la perpetuidad de su mal adquirida posesión, lo conduce por fin a la ruina.